Cada año, el primer sábado de octubre, durante la "Nocturne des Coteaux de la Citadelle", la famosa escalera del monte de Bueren y los alrededores son iluminados por montones de velas.
Ademas ponen varios puestos en los que puedes comerte un delicioso bocadillo o probar los famosos gofres con chocolate calentito.
A pesar de ser un sábado en el que parecía que la lluvia no iba a parar, esta nos dio una pequeña tregua para que pudiéramos disfrutar de las vistas y dar una vueltecilla.
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| Aunque al final acabamos mojándonos ¿ Como nos lo ibamos a perder? |
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